el ultimo domingo se jugo el clásico en el baloncesto español, el madrid se fue al descanso con una diferencia de 11 puntos, el barcelona acabo remontandolo en los uútimos cuartos hasta colocarse con dos canastas de diferencia, a pesar de esto una canasta de sergio llul en el último segundo decidio la victoria para el madrid.
El Barça ha perdido pero puede irse de Madrid muy satisfecho. El equipo de Georgios Bartzokas ha realizado seguramente su mejor partido de la temporada, cumpliendo sobradamente en muchas de las facetas en las que ha flaqueado en los últimos meses. Los azulgrana han ejecutado casi a la perfección su plan de partido, imponiendo un ritmo lento, controlando casi siempre el rebote para impedir correr a su rival, explotando el magisterio ofensivo de Tomic en la zona y jugando con esa paciencia que reclama insistentemente Bartzokas.
En el WiZink Center el Barça siempre ha tenido la calma para dar un pase extra en busca de una mejor posición. Y, lo que todavía es más importante, ha mostrado la fortaleza mental que tanto se le ha echado en falta en muchos partidos de esta difícil campaña. Los jugadores de Bartzokas no se han venido abajo cuando el Madrid ha dado su arreón en la recta final del primer tiempo, con triplazo de Llull bobre la bocina del descanso (47-36), ni tampoco cuando cinco puntos seguidos de JayceeCarroll han roto a menos de tres minutos para el final la igualdad que se estaba viendo en el último cuarto (71-65). El Barça nunca se ha dejado ir, ha competido hasta el final y si no se ha llevado la victoria ha sido por la magia de Llull, autor de cinco puntos increíbles sobre las bocinas de final del primer tiempo y del segundo.
El Barça ha perdido pero puede irse de Madrid muy satisfecho. El equipo de Georgios Bartzokas ha realizado seguramente su mejor partido de la temporada, cumpliendo sobradamente en muchas de las facetas en las que ha flaqueado en los últimos meses. Los azulgrana han ejecutado casi a la perfección su plan de partido, imponiendo un ritmo lento, controlando casi siempre el rebote para impedir correr a su rival, explotando el magisterio ofensivo de Tomic en la zona y jugando con esa paciencia que reclama insistentemente Bartzokas.
En el WiZink Center el Barça siempre ha tenido la calma para dar un pase extra en busca de una mejor posición. Y, lo que todavía es más importante, ha mostrado la fortaleza mental que tanto se le ha echado en falta en muchos partidos de esta difícil campaña. Los jugadores de Bartzokas no se han venido abajo cuando el Madrid ha dado su arreón en la recta final del primer tiempo, con triplazo de Llull bobre la bocina del descanso (47-36), ni tampoco cuando cinco puntos seguidos de JayceeCarroll han roto a menos de tres minutos para el final la igualdad que se estaba viendo en el último cuarto (71-65). El Barça nunca se ha dejado ir, ha competido hasta el final y si no se ha llevado la victoria ha sido por la magia de Llull, autor de cinco puntos increíbles sobre las bocinas de final del primer tiempo y del segundo.
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